martes, 23 de enero de 2018

Un pedido de principio a fin


Hoy os voy a contar como son los entresijos de iCukadas, para que sepáis como funciona todo, entendáis porqué los pedidos hechos a mano no se pueden enviar de un día para otro y si nunca habéis encargado nada os sea más fácil hacerlo, que es muy fácil, en serio, solo tenéis que enviar un correo.

Pero aun así os lo cuento todo y así nos conocéis un poco mejor.


Todo empieza en el taller, bueno, en realidad empieza en mi cabeza, que no para de dar vueltas y le falta tiempo para hacer todo lo que se le ocurre. 

Hago alguna de las mil cosas que se me pasan por la cabeza, diseño, bocetos, elección de los materiales y me pongo a trabajar.


Le doy forma a todo eso que ha pasado por mi cabeza, que se ha medio materializado en un boceto y que acaba siendo una de esas cositas que véis por el blog.

Una vez hecho, le hago una buena sesión de fotos, busco la mejor luz, el atrezzo de fondo, ángulos por aquí y por allá y lo tengo.


Ahora toca editar en el ordenador, ponerle a las fotos la marca de agua, recortar si hace falta, dar algo de luz o contraste, seleccionar las mejores fotos y una vez que están, las subo al blog y a las redes sociales.


Aquí es donde vosotras véis algo que os gusta, y pensáis en comprarlo, queréis saber precio etc y enviais un correo.

Si lo véis en Instagram tenéis el correo en la bio y a parte hay un botón donde pone CORREO ELECTRÓNICO, que si pincháis envíais el correo directamente.


Si véis lo que os gusta en Facebook, tenéis en INFORMACIÓN el correo y el enlace a Instagram, pero también tenéis un botoncito que se llama COMPRAR y os lleva directamente al blog, donde podéis ver todos los productos, por categorías en las pestañitas de arriba.


En el blog, nada más entrar, tenéis un cartelito con el correo para hacer los pedidos, y también tenéis un botón de COMPRAR, donde os vuelve a poner el correo y os cuenta un poco los detalles, que todo se hace a mano y necesita un tiempo, que enviamos por correo certificado etc...


Así que, envíais un correo y me comentáis lo que os gusta, y yo, lo más rápido posible, os contesto el correo y os mando un presupuesto y toda la información del producto que os interesa y de lo que me preguntéis.


En esta parte, ya tenemos un trato de tú a tú , ya sea por vía mail, por whasapp o por teléfono y concretamos el pedido.

Una vez concretado el pedido, toca planificar, hay muchos pedidos, unos más grandes, como 150 alfileres para una boda por ejemplo, otros pequeñitos, como un broche personalizado.
Unas tenéis una fecha tope, como la boda o un cumpleaños, otras tenéis menos prisa, todo eso influye en la fecha de entrega, en el tiempo que tardaré en realizarlo, pero una vez que confirmáis el pedido os digo la fecha exacta en la que os lo voy a enviar como máximo.


Y una vez todo bien organizado, selecciono el material necesario, la mayoría de las veces fimo, pero  a veces telas o fieltro, o incluso goma eva.


Y me pongo a realizar vuestro pedido. Normalmente hago varios a la vez, porque entran el mismo día, son para la misma fecha, y así aprovecho el horno, para meterlo todo a la vez.

Si el pedido es de cosas para bebés, corto, coso, bordo etc y se hace más del tirón, pero si es de fimo toca mezclar colores y hacer los trocitos.


Luego le voy dando forma, en cadena, por ejemplo, a todos los cuerpos de las abejitas.


Después pongo todas las alas, luego todos los ojos, luego todas las flores, hasta que están listos para ir al horno.


Una vez que salen del horno, hay que esperar a que se enfríen para pintarles los últimos detallitos.


Y una vez que se pintan los detalles y se han secado bien, les doy el barniz.


Todo esto puede llevar varios días, a veces semanas, imagináos lo que es poner los ojitos o los lazos a 200 alfileres de búhos, 50 abejas, 20 mariquitas y 30 cupcakes, por ejemplo. Pues esto lleva su tiempo, y aunque cada vez voy más rápido y a veces tengo ayuda, no hay una máquina mágica que saque los búhos tal cual los véis.


Ocurre lo  mismo con todo, aquí todo se hace a mano, la única máquina que se ultiliza a veces es la de coser.


Y además, las cosas de tela, hay que plancharlas al final, que no se tarda mucho, pero el fimo, con pintura y barniz, se tiene que secar, no podemos enviar las cositas con el barniz húmedo y que se peguen unas a otras no?


Una vez que está todo bien seco, o cosido y planchado, toca empaquetar, con cuidado de enviar a cada una lo que ha pedido.


Y una vez empaquetado, toca ir a correos a certificarlo y asegurarlo todo, para que os llegue perfecto a vuestras casas.


Una vez enviado, os aviso y os doy el localizador de correos y mi trabajo acaba aquí. Ya sois vosotras las que abrís el paquete y utilizáis nuestras cositas para lo que os plazca, bodas, bautizos, depedidas o simplemente porque os gusta un imán para vuestra nevera.

Esto es el día a día por aquí, en el pequeño taller, aunque también tenemos que hacer facturas, salir a comprar el material y otras muchas cosas menos divertidas que modelar o pintar, pero al final merece la pena, y cuando me mandáis una foto de vuestro peque con un chupetero nuestro, o de vuestra boda, con vosotras vestidas de novia entregando los alfileres a las invitadas, los malos ratos se olvidan.

Por eso, Mil gracias por estar ahí, por seguir ahí después de tantos años y seguir confiando en nosotros para vuestros días especiales.

Las clientas habituales ya sabíais parte de todo esto, pero para las nuevas, ya véis como trabajamos por aquí, de forma artesanal y con un trato cercano y personal, que al final a mi por lo  menos, es lo que más me gusta.

Hasta la semana que viene, pasadlo genial!!!


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mil gracias por vuestros comentarios ;)